En el mercado existen diversas opciones de colchón que prometen mejorar la calidad del sueño y por ende la calidad de vida. Sin embargo, para que la búsqueda y compra sea más asertiva, es importante conocer cuáles son las características y beneficios que se ofertan.
Colchones de espuma
Se diferencian entre si por la densidad y la altura. La densidad mínima que se utiliza para elaborar colchones es de 25- 26 Kg./m³ y un espesor considerable varía entre los 18 a 20 centímetros. Entre más denso sea el colchón mejor será su calidad y resistencia. Los colchones de espuma conservan más el calor.
Colchones resortados
Tienden a ser más firmes, se diferencian entre sí por la cantidad de vueltas que tienen en cada resorte, entre más vueltas más firme y mejor calidad de vida del colchón. Los colchones resortados evitan que se acalore el colchón, son más frescos.
Se pueden encontrar colchones con ambas composiciones, espuma y resorte, además con diferentes tecnologías:
- Tecnología Power Coil en colchones resortados: Cada unidad de resorte se encuentra empaquetada de manera individual, esto permite un movimiento independiente que se ajusta a la postura natural del cuerpo. Su tecnología elimina por completo los molestos ruidos provocados por los resortes tradicionales.
- Colchones con Pillow: el pillow es un acolchado extra que se pone en la parte superior del colchón y brinda una sensación de confort. Este viene en diferentes tamaños, entre más altos mayor comodidad.
- Colchones Memory Foam o Visco Foam: están elaborados con una espuma con memoria que se adapta a la huella térmica del cuerpo y disipa su presión de manera uniforme.
En Linio existe un rango de firmeza en escala de 1 a 5 siendo 1 blando y 5 firme. Se recomienda firmeza para jóvenes y a quiénes se encuentran en edades más adultas los blandos pueden ayudar a que las articulaciones y huesos se lastimen menos.
Los hoteles, por ejemplo, escogen colchones firmes, dado que tienden a durar más en el tiempo. Un colchón firme se recomienda a personas con problemas de espalda (dolores frecuentes). Sin embargo, la firmeza ideal depende de las necesidades individuales.
Usualmente las superficies de los colchones pueden ser de Jacquard (elaborado con lana, algodón o viscosa) tejido de punto (entremallado) o incluso bambú (amigable con el medio ambiente y repelente al agua).
Recomendaciones generales
- La vida útil máxima de un colchón es de 10 años, esto depende de su tecnología pero se recomienda que se cambie en este periodo de tiempo
- Poner protectores al colchón evita que se moje, que aloje acaros y en general ayuda a mantenerlo limpio.
- El colchón debe rotarse con frecuencia para que se desgaste por ambos lados
- El colchón debe airearse unos minutos entre el cambio de los tendidos.
Por último, dormir bien también depende de una buena almohada. La composición de las almohadas en su mayoría es fibra hueca siliconada por lo que es importante tener en cuenta que entre más alto el gramaje de la composición la almohada será más abullonada. También existen opciones de plumas y con tecnología Memory Foam.
Un texto de: Mónica García, Category Specialist
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